A partir del próximo viernes la japonesa Toyota Motor Corp detendrá la producción de vehículos en su fábrica rusa, en tanto que ya suspendió las importaciones de vehículos a ese país en forma indefinida, debido a las interrupciones en las cadenas de suministro.

De esta manera, Toyota se sumó a otros fabricantes de automóviles japoneses, como honda, que también citó problemas de suministro y logísticos para operar en Rusia.

Toyota es la marca japonés principal de Rusia y produce unos 80 mil vehículos en su planta de San Petersburgo.