De pronto, el presidente Andrés Manuel López Obrador, se quedó callado, pegó tres veces en el atril y dijo: “tuvimos suerte” cuando habló esta mañana del temblor que por tercera vez en 27 años, sacudió a México en 19 de septiembre con una intensidad de 7.7 grados.

“Ayer fue un día difícil, pero la gente supo comportarse con aplomo y tuvimos suerte porque fue (…) un temblor de considerable intensidad y es lamentable la pérdida de las vidas humanas, aunque sean dos, pero no pasó a mayores. Así como se puede decir qué mala suerte de que el mismo día a la misma hora, también lo otro, qué buena suerte de que no pasó a mayores”.

Añadió que sobre este dicho ya cada quien hará sus reflexiones, pero por lo que a él corresponde, como gobernante del país el resultado no fue tan dramático, tan grave (…) tenemos protección.

Antes, la coordinadora nacional de Protección Civil, destacó la participación de unos 30 millones de personas en el Simulacro nacional del temblor que conmemoraba los sismos del 19 de septiembre de los años 1985 y 2017.

Informó que a las 13:05 horas se registró un nuevo sismo de magnitud 7.7 con epicentro a 63 kilómetros con epicentro en el sur de Coalcomán, Michoacán, a una profundidad de 15 kilómetros.

Informó que de inmediato, estando presentes los integrantes del Comité Nacional de Emergencias, se activaron los planes y protocolos de auxilio a la población, así como la evaluación de daños que continúa al día de hoy.

Hasta las siete de la mañana de este martes 20 de septiembre se habían registrado 692 réplicas, siendo la de mayor magnitud a las 03:00 am con una intensidad de 5.8 grados.

Dijo que la mayor afectación se registró en Colima en donde se reportaron dos personas fallcidas en Manzanillo, así como el impacto en Michoacán con nueve lesionados.

Se estima la afectación a 153 viviendas con daños estructurales y fachadas, además de 20 inmuebles con daños estructurales, dos templos religiosos, siete unidades médicas y cinco puentes dañados.