Redacción
El azúcar añadido en las dietas de los niños los pone en mayor riesgo de desarrollar caries. Ahora, un estudio que acaba de publicarse en The Journal of the American Dental Association, investigadores de la Asociación Dental Estadounidense han avanzado en detectar cuáles son las fuentes de incorporación de mayor ingesta de azúcar en la rutina infantil. En su documento informaron que más de dos tercios (72%) de los abuelos miman a sus nietos pequeños con comidas y bebidas azucaradas.
También dieron cuenta de que los abuelos generalmente alimentan a sus hijos con grandes cantidades de alimentos y bebidas cariogénicos (que causan caries) o no limitan el consumo de estas golosinas a sus nietos. Los ejemplos de alimentos azucarados incluyen refrescos, jugos, productos horneados (tortas y facturas) y dulces.
Estos hallazgos provienen de una investigación realizada en conjunto con las universidades de Pittsburgh, West Virginia y Michigan. Este estudio personal requirió dos años e incluyó a 126 madres. Examinó qué factores influyeron en las madres para finalmente hablar sobre los abuelos.
En particular, mientras que el 72 por ciento de las madres encuestadas indicó que los abuelos de sus hijos los miman con golosinas azucaradas, solo un poco más de la mitad (51%) decidió abordar el tema con los abuelos.
“Tengo muchos recuerdos felices de asaltar el tarro de dulces en la casa de mis abuelos y, como padre, he dudado con algunas en tener alguna de estas charlas. Sin embargo, las caries son la enfermedad infantil crónica más común y pueden causar un dolor excesivo, así como problemas para hablar, comer, jugar y aprender. Con el tiempo, además de los problemas de salud dental, una dieta con exceso de azúcares agregados aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y obesidad en los niños, entre otros problemas de salud”, afirmó el portavoz de la ADA, Genaro Romo, dentista de Chicago, en la presentación de la investigación.
De acuerdo con la Asociación Dental Estadounidense (ADA), cuanto un niño come o bebe más productos azucarados, mayor es su riesgo de caries. Las bacterias orales se alimentan de azúcar produciendo ácido que ataca y debilita el esmalte dental. Además, la ADA también realizó una encuesta separada en enero pasado entre 1002 padres de niños de 17 años o menos. Los resultados indican que más de dos tercios de los padres (68%) creen que sus hijos comen más alimentos y bebidas azucarados con sus abuelos que en casa.
El 73% dice que está dispuesto a hablar con sus propios padres, pero no con los padres de su pareja. En tanto, menos de la mitad (43%) dice que sería capaz de hablar a los padres de su pareja. Solo un tercio de los padres (34%) afirma que confrontaría tanto a sus padres como a los de su pareja.
“No hay nada más dulce que la relación entre los niños y los abuelos. Tener la conversación de golosinas con moderación, fomentar el agua o la leche en lugar de jugos o refrescos, y si ofrece una golosina, optar por chocolate simple porque la saliva lo elimina de la boca más fácilmente que los caramelos pegajosos o duros, son tres recursos inteligentes para ayudar a los abuelos y no perjudicar a los chicos”, agregó la vocera de la ADA, Mary Hayes, dentista pediátrica-.
La ADA recomienda que los niños se cepillen los dientes dos veces al día con una pasta dental con flúor, usen hilo dental todos los días y visiten al dentista con regularidad, además de reducir los alimentos azucarados.
También participaron de la investigación Jacqueline M. Burgette, Kevin C. Lu, , Zelda T. Dahl, Betsy Foxman y María L. Marazita.