Volvo Cars anunció que abrirá una tercera planta de fabricación en Europa para satisfacer la continua demanda de vehículos eléctricos por parte de sus clientes y capturar el potencial de crecimiento a futuro.

La nueva planta de última generación será climáticamente neutral y fabricará únicamente vehículos eléctricos, lo que refuerza la aspiración de Volvo Cars de ser una compañía totalmente eléctrica para el año 2030 y climáticamente neutral para 2040, así como continuar ampliando su capacidad de producción mundial para cumplir con sus planes de crecimiento.

Al elegir Eslovaquia como la ubicación de su nueva planta, Volvo Cars crea un triángulo europeo de fabricación que cubre su mayor región de ventas, complementando la planta de Gante (Bélgica) en Europa occidental y la de Torslanda (Suecia) en el norte de Europa.

La nueva planta representará una inversión de aproximadamente 1.2 mil millones de euros y estará localizada cerca de Kosice, en el este de Eslovaquia, y formará parte de una cadena de suministro automotriz bien establecida al convertirse en la quinta planta de automóviles del país.

Volvo Cars tiene la ambición de lograr ventas anuales de 1.2 millones de automóviles a mediados de la década, lo que pretende conseguir con una huella de fabricación global que abarque Europa, Estados Unidos y Asia.

Jim Rowan, director ejecutivo de Volvo Cars, comentó al respecto que “estamos enfocados en convertirnos en una marca de movilidad puramente eléctrica para 2030, lo cual coincide con nuestro propósito.

La expansión en Europa, nuestra mayor región de ventas, es crucial para nuestro cambio hacia la electrificación y el crecimiento continuo.

Eduard Heger, primer ministro de la República Eslovaca comentó que “agradezco que Volvo Cars haya decidido construir su nueva planta en Eslovaquia. Esta nueva planta es importante para nosotros, ya que mejorará la situación social y económica de la región y producirá únicamente vehículos eléctricos, lo cual le brinda a la industria automovilística eslovaca una perspectiva competitiva en la nueva era ecológica.”

Está previsto que la construcción de la planta de Kosice comience en 2023 y que los equipos y las líneas de producción se instalen durante 2024. La producción en serie de la próxima generación de vehículos Volvo puramente eléctricos está prevista para comenzar en el año 2026.

De acuerdo con la aspiración de Volvo Cars de tener operaciones de fabricación climáticamente neutras para 2025, la planta utilizará únicamente energía climáticamente neutra.

La planta está diseñada para producir hasta 250 mil automóviles al año y se espera que ofrezca varios miles de nuevos empleos en la región. La ubicación también permite ampliar la planta en el futuro.