Redacción
Ante los embates que deja la emergencia sanitaria por el COVID19, como desempleo y recortes salariales, las empresas pueden impulsar prestaciones para sus trabajadores, sin que signifiquen erogaciones para las compañías, condición que les permitirá superar la actual coyuntura económica.
Gustavo Boleti, CEO de SalaryFits, explicó que hoy en día, las empresas tienen que enfrentar gastos como el pago de rentas atrasadas, de agua, luz, teléfono, impuestos, además de los salarios de los trabajadores.
Sin embargo, ante la imposibilidad de hacer frente a dichos gastos, miles de empresas se han visto en la necesidad de recortar personal. De acuerdo a datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la pandemia ha cobrado más de un millón 100 mil empleos en México durante los últimos cuatro meses.
“Como los empresarios no cuentan con suficientes ingresos porque se frenó la actividad productiva para evitar contagios, tuvieron que hacer recortes a las prestaciones y dejaron a sus empleados sin vales de despensa o de gasolina, seguros de gastos médicos mayores, entre otros”, apuntó el especialista.
Sin embargo, afirmó que pese a esta realidad, lo cierto es que hay directivos del sector privado en México que optaron por ofrecer prestaciones vía nómina mediante herramientas tecnológicas gratuitas que permiten al trabajador acceder a créditos, adelantos de salario, seguros, compra de línea blanca, tratamientos odontológicos, entre otros.
Por ejemplo, ejemplificó que la plataforma SalaryFits opera en 180 sistemas de nómina que ofrece un alcance de casi medio millón de trabajadores en México, quienes pueden acceder a simuladores vía aplicaciones de celular para ver cuánto pagarán por un crédito en pagos parciales, pueden comparar tasas de interés, consultar estados de cuenta, autorizar descuentos y ver detalles de sus pagos.
En este sentido, dijo que una de las ventajas del territorio mexicano es que el mercado del descuento vía nómina ya está consolidado. Un dato que da cuenta de ello es que la tasa de morosidad de los préstamos de nómina fue de 3%, menor al 4.4% que tuvo el crédito al consumo en general.
