Por Alejandro Durán
Como resultado de los efectos de la pandemia del COVID19 y la estrategia política de la actual administración federal, la economía mexicana inició este 2021 con “el pie izquierdo”, pues reportó una caída a tas anual de 4.2 por ciento, con lo que ligó 19 tropiezos consecutivos, la peor racha desde que se reporta la variable (1994).
De esta manera, de acuerdo con datos ajustados por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el comportamiento de la economía mexicana, medida a través del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), fue resultado del desempeño negativo que mostraron dos de sus tres principales componentes.
En este sentido, mientras que las actividades secundarias (industria) y terciarias (comercio y servicios), cayeron 3.7 y 4.6 por ciento, respectivamente, las primarias (agricultura), avanzaron 3.1 por ciento.
En su comparativo mensual, resultó que el IGAE reportó un marginal avance de 0.1 por ciento de diciembre a enero, el menor avance mensual desde junio del año pasado.
Al respecto, Jorge Gordillo Arias, director de Análisis Económico de Ci Banco, explica que la debilidad que mostró la economía mexicana a inicios de este año respondió, principalmente, a las mayores restricciones para las actividades sociales y productivas aplicadas por la mayoría de las entidades federativas para revertir el repunte en el número de contagios por COVID19.
“A la economía le pesó en su desempeño las afectaciones en las actividades terciarias, las cuales resintieron las medidas restrictivas implementada para hacer frente a la pandemia de COVID-19; a tasa anual, la caída es de 4.2 por ciento, mayor a la contracción reportada en diciembre de 3.7”, comentó.
De acuerdo con datos originales (sin estacionalizar), el IGAE cayó 5.4 por ciento a tasa anual, lo que representó el peor inicio de año dese la caída de 6.6 reportada en enero de 2009.