El sector agropecuario no puede estar ausente del debate climático, porque la crisis ambiental en los sistemas agroalimentarios está afectando a los países del continente, particularmente a los productores más vulnerables, dice el organismo

La 28ª conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP28), que se celebrará en la ciudad de Dubái, Emiratos Árabes Unidos, del 30 de noviembre al 12 de diciembre, tendrá un espacio denominado Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas, que albergará por segunda vez consecutiva las discusiones del más alto nivel sobre el rol de la agricultura regional en los esfuerzos de mitigación y adaptación.

La Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas será un espacio en el que se escuchará la voz de ministros y altos funcionarios de las carteras de Agricultura, directivos de compañías agroalimentarias, representantes de organizaciones de productores y científicos especializados en agro y ambiente, convencidos de que la producción de alimentos es una actividad de la que depende el futuro de la humanidad y debe ser escuchada en la discusión ambiental.

La Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas será instalado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), sus 34 Estados Miembros y organizaciones aliadas de los ámbitos público y privado, igual que lo hicieron en 2022, en la COP27, realizada en Sharm El Sheik, Egipto.

La COP28 es un encuentro de relevancia mundial, en el que los más importantes líderes de los países discutirán cómo seguir avanzando en los objetivos de mitigación y adaptación al cambio climático que fueron adoptados por la comunidad internacional en 2015, a través del Acuerdo de París.

La acción colectiva enfrentará el cambio climático

La participación del IICA y sus aliados en la cita global fue aprobada formalmente durante la última Conferencia de ministros de Agricultura de las Américas, celebrada en octubre en San José de Costa Rica.

En esa ocasión, ministros y altos funcionarios de los 34 Estados Miembros respaldaron el trabajo del organismo de desarrollo agropecuario y rural, cuya agenda de cooperación internacional tiene como una de sus principales áreas de trabajo la mitigación, la adaptación y la resiliencia ante el cambio climático.

“El sector agropecuario no puede estar ausente del debate climático, porque el impacto de la crisis ambiental en los sistemas agroalimentarios está siendo sentido en los países de nuestro continente por los productores, especialmente los más vulnerables. La agricultura es única por el aporte que puede hacer a la acción climática, gracias a su capacidad de secuestrar carbono y sus prácticas de adaptación”, dijo el director General del IICA, Manuel Otero.

“Solo mediante la acción colectiva podremos enfrentar el cambio climático. Por eso vamos a hacer escuchar las voces de los ministros de Agricultura y del sector productivo e industrial del continente en la COP28”, agregó Otero.

Mayor productividad con menos recursos

La Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas será el ámbito principal en el que se podrán conocer en la COP28 los esfuerzos que vienen haciéndose para aumentar la productividad con menor uso de los recursos naturales en las Américas, continente clave para la seguridad alimentaria y nutricional y la sostenibilidad ambiental mundiales.

La presencia del sector en la COP 28 es indispensable debido a que el cambio climático, conjugado con crisis superpuestas de carácter económico, político y bélico, ha puesto a la seguridad alimentaria al tope de la agenda mundial. Es un tema en el cual el hemisferio occidental juega además un papel insoslayable, ya que es responsable de alrededor del 28% de las exportaciones agroalimentarias del planeta y es dueño de una extraordinaria riqueza de recursos naturales, cuya conservación es decisiva para la lucha contra el calentamiento global.

Oportunidades para ser más sostenible

El mensaje del IICA en Dubái hará hincapié en que el agro de las Américas tiene grandes oportunidades para ser más sostenible, productivo y resiliente, y al mismo tiempo fortalecer su posición como garante de la seguridad alimentaria mundial y generador de empleos y bienestar rural.

Las transformaciones de los sistemas agroalimentarios tienen que basarse, en ese sentido, sobre tres premisas principales: los agricultores deben ser actores centrales de todos los esfuerzos; las decisiones tienen que estar basadas en ciencia y la agricultura es parte de las soluciones climáticas.

El pabellón en la COP28 es un esfuerzo conjunto del IICA y sus socios, tendiente a generar nuevas alianzas internacionales que financien, aceleren o escalen la implementación de las contribuciones a la mitigación y adaptación al cambio climático. Estas incluyen acciones en materia de salud de los suelos, gestión del agua, conservación de la biodiversidad, recuperación de áreas degradadas y medios de vida, economía circular y medición y monitoreo de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Así, la Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas será un espacio en el que se escuchará la voz de ministros y altos funcionarios de las carteras de Agricultura, directivos de compañías agroalimentarias, representantes de organizaciones de productores y científicos especializados en agro y ambiente que están convencidos de que la producción de alimentos es una actividad de la que depende el futuro de la humanidad y debe ser escuchada en la discusión ambiental.