De cara al cierre del año, en la primera mitad de noviembre de 2023 la inflación repuntó 0.63 por ciento, con lo que rompió una tendencia a la baja y constituyó el mayore avance de las últimas 48 quincenas.

Con ello, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la inflación general a tasa anual se colocó en 4.32 por ciento, luego de que en octubre pasado fue de 4.26 por ciento.

Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, alertó que el repunte de la inflación obedeció al ajuste a las tarifas eléctricas, aspecto que si bien ya estaba descontada, lo cierto es que otro factor que influyó de manera sorpresiva fue el incremento en costos de mercancías y alimentos, lo que evidencia, enfatizó la analista, que las presiones inflacionarias aún están presentes.

“El repunte en la inflación se debió principalmente al componente no subyacente por el cambio en las tarifas de energía eléctrica, lo cual ya se esperaba; sin embargo, la mala noticia estuvo en el repunte de mercancías alimenticias y servicios, dentro del componente subyacente”, explicó la economista a través de su cuenta de X.

En ese sentido, la analista explicó que la inflación subyacente determina la trayectoria de la inflación en el mediano y largo plazo, por lo que su aumento, apuntó, representa una preocupación.

“Con esto -agregó Gabriela Siller-, la expectativa de inflación para diciembre del 2023 se mantiene sin cambios en 4.6 por ciento anual”.

Por su parte, Jorge Gordillo Arias, analista de Ci Banco, consideró que las cifras de inflación son consistentes con los planes del Banco de México (BANXICO), de no modificar su tasa de interés de fondeo y especular con posibles reportes a finales del primer o principios del segundo trimestre de 2024.

¿Qué empujo la inflación?

Para dimensionar el comportamiento actual de la inflación, cabe mencionar que mientras en la primera quincena de noviembre del presente año el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), reportó un avance quincenal de 0.63 por ciento, mientras que igual periodo de 2022 la variable se colocó en 0.56 por ciento.

De acuerdo con el INEGI, el desempeño de la inflación en la primera mitad del presente mes fue resultado del comportamiento del alza y baja en precios de diferentes productos y servicios.

Así, las mayores alzas se registraron en electricidad (22.26 por ciento), tomate verde (18.83); transporte aéreo (11.59); chile poblano (14.30); servicios profesionales (8.72); y huevo (7.83 por ciento).

En contraparte, las bajas más importantes se observaron en limón (-15.85 por ciento); calabacita (-5.30); cebolla (-3.87); hoteles (-3.76); televisores (-2.29); aguacate (-2.73); y suavizantes y limpiadores (-1.42 por ciento).