Para que en la noche de Navidad, Santa Claus pudiera entregar todos los regalos o al menos un saludo, tendría que viajar a la velocidad de la luz y hacer uso de la tecnología cuántica para visitar a millones de niños de manera simultánea en todo el mundo, y lograr que el tiempo deja de ser un problema, señaló el investigador del Instituto de Ciencias Físicas de la UNAM, Humberto Saint-Martin Posadas.

Suponiendo que el también conocido como San Nicolás sólo cuenta con 12 horas para recorrer el orbe, porque en teoría los niños duermen a las 21:00 horas y despiertan a las 09:00 horas, los dos escenarios para que entregue todos los regalos son: viajar a una velocidad tan alta que el tiempo de recorrido no sea un problema; o bien, teletransportarlos cuánticamente, es decir, crear un estado cuántico en un lugar que permita la comunicación con otros sitios. Esta última opción superaría la posibilidad de la velocidad de la luz, según el académico.

La entrega de los obsequios también es posible resolverse con las leyes físicas conocidas, al aprovechar un fenómeno que inclusive fue galardonado con el Premio Nobel de Física 2022: la teletransportación cuántica.

Recordó que, Alain Aspect, John Clauser y Anton Zeilinger fueron reconocidos por su trabajo en la mecánica cuántica y la ciencia que describe el comportamiento de las partículas subatómicas; especialmente, el trabajo respecto al entrelazamiento cuando dos o más partículas cuánticas, generalmente fotones (luz) pueden permanecer fuertemente conectadas cuando están lejos y sin estar físicamente vinculadas.

Esa teoría explica como Santa Claus podría cumplir con todos sus compromisos en el transcurso de la víspera de Navidad, de manera similar a lo que ocurría en la serie de ficción “Viaje a las Estrellas”, donde se muestra la teletransportación mediante la cual los personajes descendían de su nave espacial a los diferentes planetas y entornos que visitaban.