Redacción

Ante la intensa actividad que mantiene el volcán Popocatépetl desde hace un par de días, se dio a conocer si las clases se mantendrán sin cambios en escuelas de algunos estados como Puebla, Estado de México y Ciudad de México, debido a la caída de ceniza que se ha por explosiones del coloso.

Incluso, el sistema de alerta de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) informó sobre la intensificación del cráter que se ha dado en las últimas horas con base a los modelos de alerta.

¿Suspenderán clases?

A pesar de los reportes que se dieron entre ayer y hoy, hasta el momento la Secretaría de Educación Pública (SEP) no ha anunciado que se quedarán sin clases.

Hasta el momento la SEP no ha asegurado la suspensión.

Sin embargo, existe la posibilidad, ya que se ha solicitado a la autoridad educativa considere la petición, debido a la dispersión de ceniza volcánica, la cual es dañina para la salud.

Según reportes, los municipios que podrían aplicar la suspensión de clases el 1 de marzo serían Ayapango, Amecameca, Atlautla, Ecatzingo, Ozumba y Tepetlixpa, mientras que en CDMX las alcaldías Benito Juárez, Coyoacán, Iztacalco, Iztapalapa y Xochimilco.

De acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), el volcán ha registrado 148 exhalaciones y 1034 minutos de tremor en las últimas 24 horas.

Sin embargo, el semáforo de alerta permanecerá en amarillo fase 2 y se debe evitar acercarse al coloso.

Por su parte, la Coordinación General de Protección Civil mantiene el monitoreo de la actividad del volcán Popocatépetl. En coordinación con las Unidades municipales de Protección Civil se realizan recorridos de inspección del estado de las rutas de evacuación, susceptibles de ser utilizadas por el incremento de actividad del volcán.

Se pide a la población mantenerse informada y en caso de ceniza cubrir nariz y boca, así como ventanas, puertas y depósitos de agua.

El tema de la dispersión de este material volcánico se ha reforzado en los últimos días, pues incluso fueron suspendidas las operaciones de los aeropuertos de Puebla y de la Ciudad de México, con el objetivo de evitar accidentes y limpiar las pistas para los despegues y aterrizajes sin ningún problema.