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Por Maricela Palacio

Otra de las consecuencias de la epidemia de Covid-19 en México será un aumento de 20 por ciento de los embarazos no planificados en adolescentes, es decir, 21 mil 575 embarazos más, a los previamente estimados por el Consejo Nacional de Población (Conapo) para el período 2020-2021, expresó la secretaria general de este organismo, Gabriela Rodríguez Ramírez.

En conferencia virtual en el marco del el Día Nacional para la Prevención del Embarazo no Planificado en Adolescentes que se conmemora el 26 de septiembre, la funcionaria federal y especialistas en salud, consideraron prioritario continuar con el fortalecimiento del acceso a métodos anticonceptivos y servicios de consejería en materia de salud sexual y reproductiva en este grupo poblacional en todas las unidades de salud.

Josefina Lira Plascencia, presidenta del Colegio Mexicano de Especialistas en Ginecología y Obstetricia (Comego), destacó que el embarazo es hoy en día un problema de origen multifactorial que amplía las brechas sociales y de género entre la población, ya que altera el proyecto de vida de la adolescente embarazada y de su entorno familiar, además de que tiene repercusiones negativas en su salud y su desarrollo psicosocial.

Todos los jóvenes tienen derecho a contar con información sobre salud sexual y reproductiva, así como a acceder a estos servicios de salud con el fin de que, si ya tienen una vida sexual activa, conozcan las opciones anticonceptivas disponibles de manera gratuita en las unidades de salud pública, como condones, píldoras anticonceptivas, inyecciones, dispositivo intrauterino o implante subdérmico, agregó.

 

Para promover un adecuado desarrollo de los y las adolescentes en su presente y futuro, es fundamental que desde esta etapa comiencen a tomar decisiones sobre su vida sexual y reproductiva, evitando así un embarazo no planificado, un aborto o complicaciones como la mortalidad materna, externó la gineco-obstetra.

El inicio de la vida sexual a edades tempranas, la falta del uso regular de métodos anticonceptivos y las limitaciones en su acceso, incrementadas en tiempos de pandemia, colocan a los métodos anticonceptivos de acción prolongada (ARAP), como una estrategia conveniente para prevenir el embarazo no planificado en adolescentes, destacó Georgina Ruvalcaba, gineco-obstetra.

La también gerente médico de Innovative Women´s Health Care de Bayer de México, precisó que los métodos de acción prolongada, además de ofrecer los índices más altos de protección tienen una eficacia no se ve afectada por errores en su uso, olvidos o abandono.